El origen de Bareto. Aquí es donde empieza todo: En nuestra barra. Un lugar único en el que venir tanto en familia como con amigos. E incluso si te apetece disfrutar de una cañita rápida por tu cuenta. Hay hueco para todos. Con una misma carta y con tres espacios diferenciados: Barra, Terraza y Salón – cualquier momento es bueno para disfrutar.

Aquí no somos de cócteles de colores con nombres impronunciables y con sabores que te recuerdan a un protector solar. Somos una cervecería, con su barra de mármol y con cañas tiradas como las de toda la vida. Aquí se viene tanto a ver los partidos de los domingos como a tomarse la primera antes de salir con los amigos. Somos de gustos sencillos – que no simples. Por eso nuestra carta tiene solo las mejores raciones y tapas que podrías esperar de un lugar como este.

No se puede ser más de Madrid. Si giras la cabeza a la izquierda: La puerta de Alcalá. Si miras a la derecha: La Diosa Cibeles con sus leones. Y justo entre medias, la terraza de Bareto. No te engañamos cuando te decimos que tenemos las mejores vistas de Madrid. Porque tampoco somos un rooftop, pero es que con semejantes monumentos cerca, no creemos que sea necesario. ¡Ah! y casi se nos olvida: Nuestra terraza admite reservas.

Sobremesas y tardeos también tienen hueco en Bareto. En nuestro salón con capacidad para más de xx personas podrás disfrutar de la misma carta que en el resto del local, pero sentados, con A/C en verano y calefacción en invierno. Tranquilo, no te vamos a cobrar más por ello. Además aquí puedes venir con o sin corbata. Nadie va a juzgarte por ello.